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ESPACIOS PROTEGIDOS RED NATURA 2000 Zonas de Especial Proteccion para las Aves (Directiva Aves) Canarias

Cumbres y acantilados del norte de La Palma ESPACIOS PROTEGIDOS RED NATURA 2000 Zonas de Especial Proteccion para las Aves (Directiva Aves)

Categoría UICN: No aplica
Código del lugar: ES0000114
Ámbito geográfico Ámbito Año de declaración Superficie oficial
Canarias
Terrestre 2006 22.685,13 ha

Descripción

Se localiza en la parte nororiental de la isla de La Palma, desde los 2200 m s.n.m. hasta la costa. Está afectado por los vientos del NE, lo cual le otorga un clima templado y seco, con veranos cálidos en las cotas bajas y frescos en las más altas. Comprende las cabeceras y tramos superiores de una serie de barrancos encajados en capas de basaltos pliocénicos entre los cuales resaltan un par de manchas de rocas plutónicas del complejo basal. Es especialmente importante la presencia de nacientes, como el de Marcos y Cordero, y la Playa de Nogales, de arenas negras y callados. Como consecuencia del gradiente altitudianl, la vegetación es muy variada, desde el matorral de leguminosas de las cumbres, donde domian el codeso (Adenocarpus viscosus), pasando por el pinar de pino canario (Pinus canariensis), que sobre los 1000-1200 m deja paso a uno de los mejores bosques de laurisilva de Canarias, con un elevado número de especies arbóreas de biotipo lauroide, como el viñátigo (Persea indica) y el til (Ocotea foetens).

En los fondos de barrancos aparecen saucedas de Salix canariensis, mientras que en las cotas más bajas pueden verse restos del bosque termófilo, sobre todo en forma de sabinares de Juniperus turbinata, formaciones de tabaibal-cardonal, dominadas por arbustos del género Euphorbia como el cardón (E. canariensis) o la tabaiba amarga (E. obtusifolia), y la vegetación halófila, la más próxima a la costa, con especies como la lechuga marina (Astydamia latifolia) y el perejil marino (Crithmum maritimum). Los vertebrados están representados por reptiles, aves y mamíferos.

Entre los reptiles se hallan el lagarto tizón palmero (Gallotia galloti palmae), el perenquén (Tarentola delalandii) y la tortuga boba (Caretta caretta), localizada en la Playa de Nogales. Los mamíferos son mayoritariamente introducidos (gatos, ratas, conejos), salvo los murciélagos, representados por el murciélago de Madeira (Pipistrellus maderensis), el orejudo canario (Plecotus teneriffae), el rabudo (Tadarida teniotis) y el nóctulo pequeño (Nyctalus leisleri). La avifauna contiene una gran riqueza. En la costa se localizan colonias de pardela cenicienta (Calonectris diomedea), así como el petrel de Bulwer (Bulweria bulwerii) y la pardela chica (Puffinus assimilis), pero es en los dominios de laurisilva donde se da una mayor riqueza, con una subespecie endémica de pinzón vulgar (Fringilla coelebs palmae), así como dos especies endémicas, la paloma turqué (Columba bolli) y la paloma rabiche (C.junoniae), y otras especies como la gallinuela (Scolopax rusticola) y la pardela pichoneta (Puffinus puffinus), que presenta aquí su principal enclave de cría en Canarias. El norte comprende una gran franja acantilada de la costa norte de La Palma, entre las puntas de la Madera y las Gaviotas.

Incluye varias desembocaduras de barrancos (La Vica, Gallegos, Franceses, etc.), y dos barrancos de grandes dimensiones y excepcional valor natural, el de Fagundo y el de los Hombres; Ambos se encuentran encajados en basaltos pliocénicos pertenecientes a la serie antigua presente en todo el edificio norte de la isla, dejando al descubierto en los sectores más incididos de sus cauces la extraordinaria potencia de las sucesivas coladas que los forman. Entre dichos barrancos se extiende el largo y estrecho Lomo de las Jaras que desciende hasta el borde de un acantilado marino, tratándose de un área muy erosionada. Todo el sector acantilado es de gran interés geomorfológico, por el intensivo proceso de desmantelamiento de la acción marina que ha hecho retroceder la primitiva línea de costa.

Al sur de este, nos encontramos un área geológicamente antigua, constituida por coladas basálticas de más de 1.000 m de potencia, que conforman todo el edificio norte de la isla. Se trata de un sector sometido a intensos procesos de erosión donde se han ido encajando las cabeceras y cauces de numerosos barrancos, que lo atraviesan de norte a sur, descolgándose desde el exterior de la caldera. Entre los cauces se recortan perfiles de interfluvios orientados en la misma dirección, que evolucionan hacia afiladas crestas, largas y estrechas. En el este nos encontramos el monte de Los Sauces y el de Las Nieves, en los altos de Santa Cruz de La Palma.

El monte de Los Sauces se extiende por la ladera noreste de la isla, abarcando un considerable desnivel altitudinal de más de 2.300 m, al descender desde las cumbres de la caldera hasta la misma costa de Puntallana. En dicho lugar, la erosión continuada a lo largo de más de un millón de años ha modelado un paisaje accidentado de barrancos gigantescos, interfluvios en loma, más o menos afilados y grandes cuencas. Cuatro barrancos importantes surcan este monte: el del Agua, el de San Juan, el de la Fuente y el de Nogales.

Además se incluyen importantes cabeceras como la de Marcos y Cordero, y la de la Galga, y elementos geomorfológicos singulares como el Cuchillete de San Juan. El monte de las Nieves incluye la fachada centro oriental de la isla, en un sector justo sobre Santa Cruz de la Palma, donde se encuentran las cabeceras y tramos superiores de barrancos como el de Quintero, El Río y la Madera. Se trata de una zona de difícil orografía, donde la erosión ha generado un paisaje diversificado de barrancos y lomos que discurren con dirección Oeste-Este.

El paisaje linda por el oeste con la Caldera de Taburiente, en una franja estrecha en crestas de más de 2.000 m de altura, mientras que su límite este se encuentra a una cota considerablemente inferior, aproximadamente a 600 m de altura. Al oeste encontramos el Barranco de Las Angustias de grandes proporciones por donde desagua la espectacular Caldera de Taburiente. Por el cauce, fuertemente encajado, son arrastradas anualmente muchas toneladas de materiales, que en más de una ocasión han provocado grandes avalanchas en la desembocadura de Tazacorte. En el lecho del barranco afloran materiales antiguos del complejo basal, constituido por lavas almohadilladas, rocas plutónicas y una densa malla de diques.

Las laderas del barranco, compuestas por materiales de la serie basáltica antigua, se muestran intensamente escarpadas a consecuencia del continuo desmantelamiento erosivo a lo largo de varios millones de años. Estos farallones tienen su mejor expresión en el acantilado de El Time con un desnivel de más de 400 m de altura. Más al sur aparece la unidad geológica denominada Cumbre Nueva.

Esta se dispone en forma de circo abierto al oeste, desde el borde meridional de la caldera de Taburiente y relleno con una base de sedimentos antiguos que se ha interpretado como los restos de una vieja caldera desmantelada. Toda esta orografía está recubierta por un tapiz verde de notoria importancia. En general, en las cotas más altas la vegetación se encuentra dominada por el codeso, junto a este, y como elemento arbustivo típico de la vegetación potencial, aparece el retamón. En la vertiente este y nordeste de la isla, más abajo, hasta los 1.500 m, se asientan comunidades de pinar, con buenas muestras de bosque de transición en sus bandas inferiores; bajo el pinar se extiende una de las mejores masas de laurisilva de Canarias, que en algunos lugares desciende hasta casi alcanzar la costa.

Al mismo tiempo, en la otra vertiente de esta ZEPA, hacia el oeste y noroeste, también encontramos una magnífica representación del pinar, con árboles de gran porte y antigüedad, que en las cotas más bajas, frecuentemente, se mezcla con almendros, y comienza a ocupar algunas zonas de cultivos abandonados. Aparte de ello, en algunos sectores inmediatamente inferiores al bosque, se asientan densos jarales que delimitan antiguos dominios de bosque. Por su parte, los escarpes costeros y de barranco conforman un hábitat rupícola con abundantes especies raras y amenazadas, la mayor parte protegidas por la normativa vigente. Sin embargo, generalmente los terrenos correspondientes al piso basal muestran una pobreza de asociaciones, parte de las cuales corresponden a comunidades de degradación del piso superior.

La pobreza en asociaciones viene motivada por las condiciones poco favorables para el establecimiento de estas comunidades en la zona septentrional de la isla. A pesar de ello, cerca de la desembocadura de algunos barrancos se pueden presentar tabaibales y cardonales, junto a algún drago..

Normativa