Dericorys carthagonovae (Bolivar, 1897) Ámbito:

Terrestre

    Origen:

Nativa

    Identificador:

10981

La especie es un endemismo ibérico que se distribuye por ambientes salobres y salinos de las provincias de Alicante, Almería, Granada y Murcia.

Los adultos han sido capturados entre los meses de junio y octubre. Las poblaciones localizadas presentan siempre un escaso número de ejemplares. La biología de la especie es poco conocida, existiendo tan sólo referencias a su comportamiento de ocultación (Aguirre y Pascual, 1986) y a su alimentación (Aguirre et al., 1987).

La especie ocupa medios áridos, entre el nivel del mar y los 1000 m de altitud, preferentemente en formaciones de matorrales xerofíticos más o menos altos, tipo tomillar-espartal con matorral de Salsola sp., Genista sp. y Thymelaea hirsuta (Barranco y Pascual, 1993) y en áreas salobres, como los almarjales, asociado a vegetación de Arthrocnenum sp.

Poblaciones pequeñas y aisladas. su rango de distribución está muy restringido a las plantas a que se asocia y, en muchos casos, el hábitat está amenazado por la presión antrópica. No obstante, es capaz de recolonizar campos de cultivo baldíos en los que se instala la vegetación adecuada.

Medidas Existentes Algunas de las zonas donde ha sido capturada la especie, presentan alguna figura de protección como zona LIC, zEPA, Parque Natural o Paraje Natural. Medidas Propuestas de forma general, las medidas deben ir dirigidas a la conservación y protección de su hábitat. debería impedirse la captura de ejemplares y limitarse la presión antrópica en algunas de las zonas donde ha sido capturada (evitar cambios en los usos del suelo, como instalación de regadíos en terreno de secano, y evitar la construcción de polígonos industriales, invernaderos y desarrollo inmobiliario, como sucede en las localidades de Andalucía).

El problema es la transformación del medio para uso humano (usos deportivos, de recreo, turísticos, industriales, agrícolas) lo que produce un gran impacto sobre la vegetación de que depende la especie. Esto explicaría la desaparición de la población de la localidad típica en Cartagena. Otro gran problema en el mantenimiento del hábitat es su transformación para reserva de aves mediante el aumento de las áreas inundadas, en particular en las zonas costeras. La pérdida de hábitat conlleva un grave riesgo en su conservación.