Pennisetum setaceum (Forssk.) Chiov. Ámbito:

Terrestre

    Origen:

No nativa

    Identificador:

10093

Especie originaria del nordeste de África, desde Túnez hasta Somalia.

Florece de marzo a septiembre. Las macollas son muy longevas, pudiendo superar los veinte años de vida. Se reproduce por semilla, que produce en abundancia por vía apomíctica, al formarse el óvulo a partir de una división mitótica sin polinización. Conservan su capacidad germinativa en el suelo durante más de seis años.

Son transportadas fácilmente por el viento y también por el agua, los vehículos, la fauna salvaje, los animales domésticos e incluso por el ser humano. Puede rebrotar de raíz. Es muy resistente al fuego, que incluso promueve su regeneración, rejuveneciendo las poblaciones y fomentando la formación de comunidades monoespecíficas de esta especie, al quedar eliminado el resto de la flora.

Presenta un crecimiento muy rápido, produciendo abundante biomasa.

Hábitat en su área de distribución natural Habita sobre suelos pedregosos y secos, así como en grietas de rocas. Hábitat en su área de introducción Pastizales y herbazales de ambientes alterados. Zonas de matorral xerofítico del piso basal. Matorrales de medianías.

Eriales y matorrales desérticos. Matorrales de ambientes costeros no excesivamente halófilos. Zonas urbanizadas.

Terrenos de cultivos y zonas verdes de origen antrópico. Franja litoral halófila (costas rocosas y acantilados costeros).

Sobre el hábitat: (1) Alteraciones en la estructura y abundancia relativa de especies nativas o endémicas, y en los patrones de la sucesión natural de la vegetación nativa. Provoca asimismo alteraciones en el régimen hidrológico, dinámica de nutrientes y minerales, disponibilidad de luz, cambios de salinidad o de pH, etc. También puede llegar a modificar el régimen de incendios. (2) Formación de rodales monoespecíficos y desplazamiento de especies nativas.

Sobre las especies: sus impactos más negativos sobre el medio se deben en primer lugar a la competencia con la vegetación nativa, a la que puede llegar a desplazar. Tal es el caso en Canarias de la gramínea autóctona Hyparrhenia hirta, a la que tiende a eliminar en las zonas donde entran en competencia. Recursos económicos asociados al uso del patrimonio natural: también invade terrenos de cultivo.

Sobre la salud humana: no se han descrito.

A, GC [Gc, La, Fu], GR, MA, TF [Tf, Pa, Go, Hi], V. Tendencia poblacional muy expansiva en las islas Canarias y, por el momento, con síntomas de expansión incipiente en la Península.

Introducción intencional como especie ornamental.

Las semillas son transportadas por el viento y por el agua, por animales, vehículos, en residuos de jardinería, etc.

Propuestas - Las mejores medidas a tomarse son las preventivas. - La retirada manual sólo es completamente efectiva si se arrancan las plantas con raíz incluida antes de que se hayan formado las semillas. Si éstas ya están formadas, deben introducirse las panículas cuidadosamente en bolsa de plástico o papel procediéndose después a su quema. Generalmente, la retirada manual requiere la realización de varias repeticiones o pasadas a lo largo del año para eliminar a todos los individuos, incluidos los juveniles que pudieron pasar desapercibidos en la primera pasada.

En caso de invasión fuerte, los métodos mecánicos por sí solos no son suficientes, siendo necesario el empleo de fitocidas. - Una vez que las plantas han sido arrancadas, puede ser efectivo realizar un tratamiento con un herbicida de preemergencia sistémico como la hexacinona, aunque debe aplicarse con precaución, utilizando gafas, debido a su nocividad para el hombre. Es necesario igualmente mantener un plazo de seguridad de 21 días antes de que entre el ganado a pastar en las zonas tratadas.

Otros herbicidas, como el glifosato, han mostrado una efectividad menor. En lugares próximos a aguas superficiales (ríos, humedales, etc.) está totalmente contraindicado el empleo de herbicidas. - En lo que respecta a los métodos biológicos de control, no se existe todavía ningún agente que pueda ser utilizado.

Desarrolladas En Tenerife y Gran Canaria, los esfuerzos por erradicarla han fracasado, centrándose ahora en evitar su expansión hacia las zonas ecológicamente más valiosas. En La Palma, sí se ha conseguido prácticamente eliminarla. Primero debe evitarse su uso en jardinería o en la formación de ramos secos, ya que con ello podemos contribuir a diseminar las semillas.

Plan Director de la Reserva Natural Especial del Malpaís de Güimar (1999), Plan Rector de Uso y Gestión del Parque Natural de Tamadaba (2003), Plan Rector de Uso y Gestión del Parque Natural de Cumbre Vieja (2001), Plan Rector de Uso y Gestión del Parque Nacional de La Caldera de Taburiente (2005), Plan Director de la Reserva Natural Especial de Los Marteles (2006). Estrategias, Planes y/o Proyectos de Gestión/Control/Erradicación: - No hay datos Dificultad de control - Su control es muy costoso económicamente.